IÚltimamente he estado ordenando un poco: tirando u organizando tarjetas, cartas y fotografías viejas, colocándolas en carpetas comprimidas y poniéndoles etiquetas hechas con mi querido Dymo. Me dio tal sensación de libertad y claridad que me dije: debería hacer lo mismo con mis recetas. Éste, por ejemplo, lo clasificaría como “mágico”, porque proviene (en su mayor parte) del armario, tanto de esa forma sencilla en la que se echan las cosas en una olla hasta que se alquimizan, como también porque el tahini y las judías, junto con un limón, pueden convertirse mágicamente en el antídoto más calmante contra el frío.
Frijoles tahini con albahaca y piñones
Preparación 15 minutos
Cocinar 40 minutos
Sirve 2-3
4 cucharadas de aceite de oliva virgen extramás un extra para terminar
2 cebollas rojaspelado y finamente picado
1 cucharadita de sal marina fina
2 limonesla ralladura de 1 pelada en tiras, luego exprimidas ambas, para obtener 5 cucharadas
4 dientes de ajopelado y picado
5 cucharadas de pasta de tomate seco
2 cucharaditas de pimienta de Alepo
2 Caja de 400 g de alubias en agua.no vaciado
1 cubito de caldo de verduras
3 cucharadas de tahini
½ cucharadita de pimienta negra recién molida3 cucharadas (30 g) de piñones
Panes planosservir
15 g de albahaca frescahojas rotas
Pon el aceite en una cacerola grande a fuego medio-bajo y, cuando esté caliente, agrega la cebolla, la sal y las tiras de ralladura de limón, y cocina, revolviendo, durante ocho minutos, hasta que esté muy suave y traslúcida. Agrega el ajo y saltea durante aproximadamente un minuto, hasta que desaparezca el olor a ajo crudo.
Añade la pasta de tomate y el pimiento de Alepo, cocina durante cuatro o cinco minutos y luego vierte los frijoles y el agua en la sartén. Cocine durante 10 minutos, luego desmenuce en la pastilla de caldo y agregue el tahini, la pimienta negra y 600 ml de agua hirviendo. Mezclar bien, reducir el fuego y cocinar a fuego lento durante 10 minutos. Agrega el jugo de limón, cocina por otros cinco minutos y luego retira del fuego.
Tuesta los piñones en una sartén pequeña y seca, revolviendo para que no se quemen, durante cuatro o cinco minutos, hasta que se doren.
Calienta los panes planos y luego divide los frijoles en dos o tres tazones poco profundos. Untar encima los piñones tostados y las hojas de albahaca, rociar con abundante aceite de oliva virgen extra y servir con las tortas de pan a un lado.



