El hombre fuerte ruso Vladimir Putin aprobó la venta de las operaciones bancarias rusas de Citi a Renaissance Capital, una firma de inversión propiedad del multimillonario Mikhail Prokhorov, ex propietario de los Brooklyn Nets.
la orden presidencial fue publicado en el sitio web del Kremlin el miércoles, confirmando un paso clave en la retirada planificada de Rusia por parte del prestamista liderado por Jane Fraser, tres años después de la invasión de Ucrania por parte de Putin que mató a decenas de miles de personas.
Renaissance Capital es parte del conglomerado Onexim de Prokhorov.
El hombre de 60 años, que vendió el equipo de la NBA a Joseph Tsai por 2.300 millones de dólares en 2019 bajo presión de Putin, huyó a Israel dos meses después de que Rusia invadiera a su vecino más pequeño.
La venta a Renaissance, que se ha visto complicada por sanciones occidentales más amplias y el congelamiento de activos de entidades rusas, aún requiere la aprobación de los reguladores estadounidenses.
Esto sigue a salidas similares del gigante de Wall Street Goldman Sachs, el Deutsche Bank de Alemania y la firma financiera francesa Société Générale.
Una portavoz de Citi dijo al Post: “La transacción está sujeta a aprobaciones adicionales y no haremos más comentarios en esta etapa”.
La noticia del dictado, que no proporcionó detalles sobre el precio o el momento de la transacción, fue informado por primera vez por Bloomberg.
La medida se produce semanas después de que la junta directiva de Citi votara a favor de nombrar a Fraser, nacida en Escocia, como presidenta de la junta directiva del banco y al mismo tiempo otorgarle un bono de 25 millones de dólares en acciones restringidas.
Citi anunció por primera vez sus planes de vender su negocio de consumo ruso en 2021 como parte del plan de reestructuración global de Fraser.
Pero en agosto de 2022, fue más allá y anunció que pondría fin a todas sus operaciones de banca comercial y de consumo en Rusia debido a la guerra, que Moscú simplemente llama una “operación militar especial”.
A finales de septiembre, el banco tenía alrededor de 11.700 millones de dólares en exposiciones de clientes a Rusia, la mayoría de los cuales eran dividendos corporativos que el gobierno ruso no permitió que Citi pagara.
Fraser planea escindir unas 14 unidades bancarias en todo el mundo y se espera que Citi complete la venta de su filial en Polonia y cierre operaciones en Corea y China como parte de su campaña para reducir costos.
Citi también planea vender su división mexicana de banca de consumo, conocida como Banamex, a través de una IPO.



