Papa León
El martes, en el vuelo de regreso de su primer viaje al extranjero, el pontífice explicó que hubo un intercambio entre obispos alemanes y representantes del Vaticano para garantizar que el proceso de reformas en Alemania no se desvíe del rumbo común de la Iglesia universal.
Leo expresó su confianza en que este diálogo continúe y que “las cosas puedan desarrollarse de manera positiva”. Al mismo tiempo, pidió más diálogo en Alemania.
Muchos católicos creen que las decisiones clave no reflejan sus esperanzas y han hecho campaña para que los laicos desempeñen un papel más influyente.
Por eso, dijo el Papa, es necesaria una escucha más intensa, para que ningún grupo quede desatendido. Sólo así se podrá garantizar una participación real, subrayó el Papa a los periodistas.
En 2019, la Conferencia Episcopal y el Comité Central de los Católicos Alemanes (ZdK) lanzaron un proceso de reforma conocido como el Camino Sinodal.
Más recientemente, con la Conferencia sinodal se lanzó un nuevo comité eclesial nacional. Allí, obispos y laicos esperan continuar sus deliberaciones sobre el futuro de la Iglesia católica en Alemania.
León esencialmente clasificó el proceso de reforma alemán como parte del movimiento sinodal global. La sinodalidad se vive de manera diferente en todas partes, dijo, pero esta diversidad no significa ruptura o división.
Las diferencias entre regiones son normales mientras se preserve el marco común de la Iglesia universal. Dijo que suponía que habría “algunos ajustes” en las decisiones tomadas hasta ahora y que mantenía la esperanza.



