Rusia maltrata y mata sistemáticamente a los prisioneros de guerra ucranianos, dijo el jueves un informe experto encargado por la Organización de Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE).
El informe, compilado por tres expertos en derecho internacional, independientemente de Francia, la República Checa y Suecia, dice que la tortura y las ejecuciones están muy extendidas.
“Estas violaciones pueden constituir crímenes de guerra y, en algunos casos, crímenes contra la humanidad”, escribieron los expertos en su informe para la organización de seguridad regional de 57 miembros.
El equipo recomendó que el Tribunal Penal Internacional (ICC) en la Investigación de Investigación de Incidentes de La Haya. La CPI ya se escucha de los supuestos secuestros de niños ucranianos y ataques contra objetivos civiles en Ucrania.
Según el informe, la evidencia creíble muestra el uso de rifles, palas, descargas eléctricas y perros en detenidos, mientras que casi el 43% de los prisioneros de guerra están sujetos a violencia sexual.
Aunque no se proporcionó un número definitivo de asesinatos en la prisión de guerra, el equipo de la OSCE señaló que la Oficina de Derechos Humanos de las Naciones Unidas había documentado pruebas creíbles desde las ejecuciones de 194 en el campo de batalla hasta mayo de 2025, junto con asesinatos reportados en establecimientos de detención.
El informe también cita las declaraciones de los comandantes militares rusos y los funcionarios que instan al trato despiadado de los prisioneros.
El ex presidente ruso Dmitry Medvedev, quien es el actual vicepresidente del Consejo de Seguridad ruso, dijo: “No tienen derecho a la vida. Ejecutar, ejecutar, ejecutar”.
Desde el comienzo de la invasión de Rusia en febrero de 2022, se han capturado alrededor de 13.500 soldados ucranianos, según el informe. Entre estos, se han liberado alrededor de 6.800, mientras que 6.300 permanecen en cautiverio.
Los resultados se basan en los testimonios de ex prisioneros, funcionarios ucranianos, informes de organizaciones internacionales y otras pruebas. Rusia no ha cooperado en la investigación.