La coalición gobernante de Alemania ha alcanzado importantes acuerdos sobre subsidios a los vehículos eléctricos, pensiones y un nuevo sistema de apoyo a la renta básica, dijo el jueves el canciller Friedrich Merz.
Después de una maratónica sesión de deliberaciones de ocho horas en la Cancillería que duró hasta bien entrada la noche del miércoles, se llegó a un acuerdo entre el bloque conservador de Merz y el Partido Socialdemócrata (SPD) de centroizquierda, reforzando las esperanzas del canciller de implementar su tan cacareado “otoño de reformas”.
Merz afirmó el jueves en una conferencia de prensa en Berlín que “habrá un nuevo subsidio básico para quienes buscan empleo, tal como se acordó en el acuerdo de coalición”.
El énfasis está en fortalecer las obligaciones de los beneficiarios de las prestaciones y tomar medidas enérgicas contra el abuso del sistema.
“Reforzaremos significativamente las obligaciones de cooperación y también aumentaremos significativamente las posibilidades de sanciones”, añadió Merz.
Esta política encontró resistencia por parte del ala izquierda del SPD, pero fue adoptada por los líderes del partido, el vicecanciller Lars Klingbeil y la ministra de Trabajo Bärbel Bas.
Este nuevo subsidio debe sustituir al actual “subsidio ciudadano” destinado a quienes buscan empleo, que no entró en vigor hasta principios de 2023.
Otros temas discutidos en la reunión del comité de coalición del miércoles incluyeron la igualdad de derechos para las personas discapacitadas y la crisis en la industria automotriz, antes de una importante cumbre para el sector automotriz en la Cancillería el jueves.
El gobierno se dispone a ofrecer nuevos incentivos para que los hogares de ingresos bajos y medios compren vehículos eléctricos, en un intento por apoyar la transición a una movilidad climáticamente neutra.