BRUSELAS (AP) — Los líderes de la Unión Europea aprobaron el jueves un plan para garantizar que Europa pueda defenderse contra ataques externos para finales de la década, mientras crecen las preocupaciones de que Rusia esté ya sondeando las defensas del bloque de 27 naciones.
“Rusia guerra de agresión contra Ucrania y sus implicaciones para la seguridad europea y global en un entorno cambiante constituyen un desafío existencial”, dijeron los líderes en una declaración en una cumbre en Bruselas.
Pidieron a los gobiernos nacionales “a avanzar en proyectos concretos que se lanzarán en el primer semestre de 2026”, de acuerdo con el nuevo plan, llamado Readiness 2030, elaborado por la Comisión Europea, el poder ejecutivo de la UE.
Una prioridad clave será construir defensas contra drones para detectar, rastrear y neutralizar drones maliciosos, siguiendo una serie de medidas. Preocupantes violaciones del espacio aéreo. en toda Europa durante el mes pasado, algunos cerca de las fronteras europeas con Rusia, Bielorrusia y Ucrania.
Esta iniciativa europea de defensa con drones formaría una parte clave de un programa más amplio llamado Eastern Flank Watch destinado a fortalecer las defensas a lo largo de la frontera oriental de Europa en tierra, en el Mar Báltico, en el Mar Negro y en el aire, así como contra ataques híbridos.
Los líderes dijeron que “para abordar las necesidades y amenazas más inmediatas”, los primeros proyectos deberían centrarse en fortalecer las capacidades anti-drones y de defensa aérea y hacer pleno uso de los fondos de la UE para este fin.
La comisión estima que el gasto en defensa de la UE este año ascenderá a unos 392.000 millones de euros (457.000 millones de dólares), casi el doble que hace cuatro años, antes de que Rusia lanzara su invasión a gran escala de Ucrania.
Estima que probablemente se gastarán unos 3,4 billones de euros (4 billones de dólares) en defensa durante la próxima década. Para remediar esto, pretende proponer aumentar el presupuesto a largo plazo de la UE para defensa y espacio a 131 mil millones de euros (153 mil millones de dólares).
El objetivo general del plan Readiness 2030 es alentar a los países miembros a decidir quién de ellos debe liderar qué proyectos y luego lanzarlos en los primeros seis meses del próximo año.
Al menos el 40% de las compras militares deberían realizarse de forma conjunta, abaratándolas y alentando a los países a utilizar armas y estándares interoperables, para finales de 2027.
Los proyectos, contratos y financiación de “capacidades críticas” (drones o satélites, por ejemplo) deberían liquidarse a finales de 2028, y todo el proceso finalizaría dos años después.
Otra parte clave del plan es ofrecer garantías de seguridad a Ucrania. Los líderes subrayaron “la importancia de una estrecha cooperación con Ucrania, así como su integración y contribución a la industria de defensa europea”.



